La Expedición de Pérez de Tolosa (Segunda Parte)

Los Táribas y Los Capuchos no estaban en los planes.

De El Tocuyo al rio Guanare, con vista a las ya descritas Sierras Nevadas (Mérida), las cuales no fueron recorridas por la resistencia de los soldados a distanciarse del reino de Granada, por tal razón bajaron hasta encontrar el rio Apure, con el riesgo inminente de que los soldados se fugasen para aventurarse hacia el nuevo reino. Con precaución se acercaron a las montañas hasta encontrar el rio Uribante, luego al rio Tormes (Torbes) hasta llegar al Valle de Las Auyamas (San Cristóbal).

Río Torbes Plumilla de Anton Goering 1870

Imagen de Carlos A. Molina

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 Allí nuestros naturales no ofrecieron resistencia, tal vez por el espanto ocasionado de ver caballos y perros que acompañaban a hombres de blanco con vestimenta rara.

Mural Táriba La Primogénita del Táchira
http://tariba.blogspot.com/

Al día siguiente, Los Taribas ya alertados por lo sucedido, abandonaron su asentamiento para refugiarse en la montaña, no obstante los españoles fueron a buscarlos para abatirlos. En la batalla nuestros naturales se defendieron hiriendo al capitán Alonso Pérez de Tolosa y otros soldados y además le mataron seis caballos. Admirable fue esta resistencia de los tariba que luego de ser replegados, les fueron saqueadas todas sus pertenencias.

Teniendo el control del Valle, decidieron no poblar esta extensión, probablemente por no precisar hasta el momento riquezas en los saqueos en los pueblos aborígenes confrontados o tal vez porque el deseo era traicionar los propósitos de la expedición y huir al nuevo reino.

Los Capuchos decidieron refugiarse en un bohío y desde esta artesanal construcción se defendieron con numerosas flechas envenenadas, las cuales lograron repeler a los invasores, que perdieron varios hombres   y caballos.

Luego de estos combates, se enrubaron hacia predios cercanos a Ocaña, retrocediendo hasta Cúcuta para luego buscar el río Zulia y subir hasta la ranchería de Maracaibo.

Rancheria de Alfinger en Maracaibo

Decepcionados, con muchas bajas y probablemente con muchos soldados que desertaron en búsqueda de riqueza fácil en el reino de Granada, decidieron regresar a El Tocuyo.

De haber sido exitosa esta expedicion; las comarcas aledañas como Cúcuta, Pamplona y Ocaña tal vez hubiesen sido colonizadas y absorbidas por Venezuela.